La Rockola
Al parecer la creatividad musical tiene una proporcionalidad directamente inversa a la edad. Al menos eso es lo que aprecio del reciente trabajo de Miki Gonzáles, del cual podrá decirse muchas cosas, pero de ninguna manera que sea original. Una lástima la verdad.
HI FI STEREO (APU 2007) es el título del inefable disco que pareciera un regreso forzoso a los éxitos del pasado, cuando la electrónica no se acercaba ni por asomo en la cabeza del músico peruano de origen español (¿?). Un recurso innecesario dada la halagüeña recepción de sus últimos trabajos creados en el ordenador.
Y lo digo cual testigo presencial al recordar que hace muchos años vi a Miki junto a varios amigos en un desparecido pub (La Luna creo que se llamaba), haciendo covers electrónicos de sus clásicos ochenteros y ahora casi una década después me encuentro con la misma fórmula, pero puesta a la venta en llamativo y colorido empaque.
El proyecto presenta ribetes de mofa cuando al músico se le ocurre declarar en RPP que las radios sólo programan “música antigua” en vez de divulgar las nuevas tendencias. ”Hay que mostrarle a la gente las nuevas propuestas porque todo lo que pasan las emisoras son cosas antiguas” (plop!), dijo muy suelto de huesos y sin el menor aspaviento.
Y nada tiene que ver que nos guste o no canciones tan entrañables como “Vamos a Tocache”, “Lola”, “Tantas veces” o “Ponte tu vestido“ que son algo así como el background musical de las dos últimas décadas. Lo que sucede es que precisamente por ese motivo, debieron preservarse tal cual fueron concebidas y no reducirse a sudorosas y morbosas pistas bailables de party rave. Fundamentalmente porque en la mayoría de estas reuniones mas que la música en sí, importa la bebida estimulante que te hace brincar.
Si eres un nostálgico de tres décadas y te gustó alguna vez la música de Miki, querrás armar tu propia fiesta ochenta y zeta, tal cual reza la publicidad de una radio capitalina. Si eres más joven y no tienes mucha referencia del músico, la verdad no debes preocuparte tanto, pues la pista baile de casi 60 minutos que es el bendito disco te sonará igual a todas. Ni más, ni menos.
Otra perla fue su manifestación hace unas semanas al Comercio cuando declaró “...no estoy supeditado al formato de tres minutos y estar en la radio. Me siento contento porque la música tiene éxito”. Con razón, ahora entiendo el concepto creativo del HI FI STEREO. No fue la innovadora propuesta musical, ni proyectar a los jóvenes su nuevo formato electrónico, fue simplemente acudir a la memoria colectiva de muchos para que cojan su billetera.
Bueno, sobre la difusión en radio también tiene razón, dudo que los programadores quieran pautear sus canciones, salvo ese loco de RUMIROCK, que hace programa los sábados en la noche en radio JR. Total, de gustos y colores, no han escrito los Djs.
Al parecer la creatividad musical tiene una proporcionalidad directamente inversa a la edad. Al menos eso es lo que aprecio del reciente trabajo de Miki Gonzáles, del cual podrá decirse muchas cosas, pero de ninguna manera que sea original. Una lástima la verdad.
HI FI STEREO (APU 2007) es el título del inefable disco que pareciera un regreso forzoso a los éxitos del pasado, cuando la electrónica no se acercaba ni por asomo en la cabeza del músico peruano de origen español (¿?). Un recurso innecesario dada la halagüeña recepción de sus últimos trabajos creados en el ordenador.
Y lo digo cual testigo presencial al recordar que hace muchos años vi a Miki junto a varios amigos en un desparecido pub (La Luna creo que se llamaba), haciendo covers electrónicos de sus clásicos ochenteros y ahora casi una década después me encuentro con la misma fórmula, pero puesta a la venta en llamativo y colorido empaque.
El proyecto presenta ribetes de mofa cuando al músico se le ocurre declarar en RPP que las radios sólo programan “música antigua” en vez de divulgar las nuevas tendencias. ”Hay que mostrarle a la gente las nuevas propuestas porque todo lo que pasan las emisoras son cosas antiguas” (plop!), dijo muy suelto de huesos y sin el menor aspaviento.
Y nada tiene que ver que nos guste o no canciones tan entrañables como “Vamos a Tocache”, “Lola”, “Tantas veces” o “Ponte tu vestido“ que son algo así como el background musical de las dos últimas décadas. Lo que sucede es que precisamente por ese motivo, debieron preservarse tal cual fueron concebidas y no reducirse a sudorosas y morbosas pistas bailables de party rave. Fundamentalmente porque en la mayoría de estas reuniones mas que la música en sí, importa la bebida estimulante que te hace brincar.
Si eres un nostálgico de tres décadas y te gustó alguna vez la música de Miki, querrás armar tu propia fiesta ochenta y zeta, tal cual reza la publicidad de una radio capitalina. Si eres más joven y no tienes mucha referencia del músico, la verdad no debes preocuparte tanto, pues la pista baile de casi 60 minutos que es el bendito disco te sonará igual a todas. Ni más, ni menos.
Otra perla fue su manifestación hace unas semanas al Comercio cuando declaró “...no estoy supeditado al formato de tres minutos y estar en la radio. Me siento contento porque la música tiene éxito”. Con razón, ahora entiendo el concepto creativo del HI FI STEREO. No fue la innovadora propuesta musical, ni proyectar a los jóvenes su nuevo formato electrónico, fue simplemente acudir a la memoria colectiva de muchos para que cojan su billetera.
Bueno, sobre la difusión en radio también tiene razón, dudo que los programadores quieran pautear sus canciones, salvo ese loco de RUMIROCK, que hace programa los sábados en la noche en radio JR. Total, de gustos y colores, no han escrito los Djs.
No hay comentarios:
Publicar un comentario